Cuando una persona sufre una parada cardiorrespiratoria, actuar con rapidez y eficacia es crucial para salvar su vida. Sin embargo, aunque el instinto inicial puede ser comenzar de inmediato las maniobras de resucitación cardiopulmonar (RCP), es importante seguir ciertos pasos preliminares para garantizar que las acciones que tomemos sean las más efectivas. Antes de iniciar el masaje cardiaco, hay tres acciones clave que deben llevarse a cabo, tal como lo establece la cadena de supervivencia.
A continuación, se explica cada uno de estos pasos esenciales:
1.-Asegurarse de que estamos ante una parada cardiorrespiratoria
El primer paso antes de iniciar la RCP es asegurarse de que la persona realmente ha sufrido una parada cardiorrespiratoria y no está experimentando una condición menos grave, como un desmayo o colapso por otra causa.
Esto es importante porque la RCP es una maniobra diseñada específicamente para cuando el corazón ha dejado de latir de manera efectiva y la persona no está respirando.
Para confirmar que se trata de una parada cardiorrespiratoria, hay que seguir este procedimiento:
- Comprobar la respuesta de la víctima: Llamar a la persona en voz alta o sacudirla suavemente por los hombros. Si no responde a estos estímulos, es posible que esté inconsciente.
- Verificar la respiración: Acercar el oído a la boca de la víctima para escuchar si respira y observar si su pecho se eleva. Si no hay respiración o esta es anormal (como jadeos), es una señal clara de paro respiratorio.
- Comprobar el pulso: Aunque este paso puede ser difícil para alguien sin formación médica, es útil intentar sentir el pulso en el cuello (arteria carótida) o la muñeca (arteria radial). Si no se detecta pulso, el corazón ha dejado de funcionar.
Si se confirma la ausencia de respuesta, respiración y pulso, estamos ante una parada cardiorrespiratoria y se deben tomar las siguientes medidas de inmediato. En cambio, si la persona sigue respirando pero está inconsciente, la situación podría requerir una atención médica diferente.
2.-Buscar ayuda de otras personas cercanas
El segundo paso es pedir ayuda. Las maniobras de resucitación cardiopulmonar requieren un esfuerzo físico considerable, especialmente si se realizan durante varios minutos.
Una persona que esté haciendo RCP podría agotarse rápidamente, lo que comprometería la calidad de las compresiones torácicas.
Por ello, es fundamental contar con la ayuda de otras personas que puedan asistir o turnarse en la realización del masaje cardiaco.
Además, mientras uno de los rescatadores se enfoca en realizar las compresiones torácicas, otro puede hacerse cargo de otras tareas importantes, como:
- Llamar al número de emergencias (112 en España), informando con precisión sobre la situación.
- Localizar un desfibrilador externo automático (DEA) cercano, si está disponible en la zona.
- Guiar a los servicios de emergencia al lugar del incidente cuando lleguen.
Incluso si no hay otras personas capacitadas para realizar la RCP, solo tener a alguien más disponible para llamar a emergencias o traer el DEA puede marcar la diferencia entre la vida y la muerte. Si no hay nadie más disponible, el rescatador debe primero llamar al servicio de emergencias antes de iniciar la RCP.
3.-Buscar y acercar un desfibrilador externo automático (DEA) o semiautomático (DESA)
El uso de un desfibrilador externo semiautomático (DESA) en una parada cardiorrespiratoria puede ser crucial para restablecer el ritmo cardíaco normal. Por ello, si no hay más personas disponibles para ayudar, es importante intentar localizar un DESA antes de iniciar la RCP, siempre que sepas que hay uno cerca.
Tener el DESA a mano antes de comenzar las compresiones evita que posteriormente tengas que interrumpir las maniobras para ir a buscarlo.
El DESA analiza el ritmo cardíaco de la víctima y, si es necesario, administra una descarga eléctrica que puede reiniciar el corazón. Este dispositivo es fácil de usar, ya que proporciona instrucciones verbales claras que guían al rescatador durante todo el proceso.
Algunas consideraciones importantes sobre el uso del DESA incluyen:
- Ubicación del DESA: En muchos espacios públicos como aeropuertos, centros comerciales y estaciones de tren, los DEA están disponibles y suelen estar claramente señalizados. Si estás en un área pública, trata de identificar la ubicación de un DEA antes de necesitarlo, o pide a alguien que lo busque mientras preparas a la víctima.
- Simplicidad del DESA: No se necesita formación médica para utilizar un DESA. Estos dispositivos están diseñados para que cualquier persona pueda usarlos, siguiendo las instrucciones visuales y auditivas que ofrece.
- Minimizar interrupciones en la RCP: Si ya has comenzado las compresiones torácicas, interrúmpelas lo menos posible cuando utilices el DESA. Por eso es mejor tener el DEA cerca antes de empezar la RCP.
En definitiva, cumplir con los primeros pasos de la cadena de supervivencia antes de iniciar la RCP es fundamental para aumentar las probabilidades de éxito. Estos pasos incluyen asegurarse de que estamos ante una verdadera parada cardiorrespiratoria, buscar la ayuda de personas cercanas y localizar un DESA antes de comenzar el masaje torácico. Al realizar estas acciones en el orden correcto, podemos optimizar la efectividad de la resucitación cardiopulmonar y maximizar las posibilidades de que la víctima sobreviva hasta que lleguen los servicios de emergencia.