Sabemos que el trabajo es parte fundamental de nuestra vida, pero a menudo olvidamos que la salud debería ser nuestra principal prioridad.
Los reconocimientos médico-laborales periódicos son una herramienta clave que, aunque a veces pasen desapercibidos o los veamos como una mera formalidad, pueden ayudarnos a prevenir problemas serios como una parada cardiorrespiratoria.
¡Y lo mejor es que no tenemos que pagar nada por ello! Las empresas están obligadas a ofrecerlos de manera gratuita como parte de su responsabilidad en el cuidado de la salud de los trabajadores.
¿Qué sucede durante un reconocimiento médico-laboral?
Cuando nos enfrentamos a estos reconocimientos, una de las primeras cosas que nos solicitan es una analítica completa. Esto puede parecer una rutina, pero la información que se obtiene es valiosísima. En estos análisis, revisan nuestros niveles de colesterol y glucosa en sangre.
Estos indicadores son clave para conocer cómo está nuestra salud interna y nos permiten detectar a tiempo problemas que podrían desencadenar en complicaciones mayores.
Por ejemplo, niveles altos de colesterol y azúcar pueden ser señales claras de una mala alimentación o un estilo de vida sedentario. Aunque no siempre nos demos cuenta, una dieta rica en grasas saturadas y azúcares, combinada con la falta de ejercicio, puede ir afectando poco a poco nuestras arterias y nuestra salud cardiovascular. Si no tomamos medidas, esto podría desembocar en un episodio tan grave como una parada cardiorrespiratoria.
Pero aquí no queda todo. En el reconocimiento médico-laboral también nos medirán la tensión arterial. Puede que no lo sepas, pero la hipertensión es uno de los grandes enemigos silenciosos de la salud. ¿Por qué lo llamamos “silencioso”? Pues porque la mayoría de las veces no da síntomas evidentes. No duele, no molesta, y puede pasar años sin que nos demos cuenta de que somos hipertensos. Sin embargo, esa presión arterial elevada está ejerciendo una presión constante sobre nuestro corazón y nuestros vasos sanguíneos, lo que aumenta enormemente el riesgo de sufrir problemas cardiovasculares como infartos o paradas cardiorrespiratorias.
Gracias a estos reconocimientos médicos, podemos detectar la hipertensión a tiempo y empezar a tomar medidas, ya sea a través de medicación o con cambios en nuestros hábitos de vida.
¿Dónde puedo hacerme el reconocimiento médico-laboral?
Si trabajas por cuenta ajena, seguramente tu empresa ya tenga establecidos estos reconocimientos periódicos.
Los puedes realizar en servicios de prevención de riesgos laborales o en clínicas especializadas con las que tu empresa tiene convenios.
Estos centros se encargan de hacer las pruebas de manera profesional y suelen estar equipados para ofrecerte toda la atención que necesitas. Además, no debes preocuparte por el coste, ya que la empresa es quien cubre estos gastos como parte de su obligación de velar por la salud de sus empleados.
Este reconocimiento médico no solo te ayuda a prevenir problemas de salud, sino que también sirve para asegurar que tu estado físico es adecuado para el tipo de trabajo que realizas, ya sea que trabajes en una oficina o en un ambiente más exigente físicamente.
¿Por qué es clave no ignorar estos chequeos?
El ritmo de vida actual y el estrés que muchas veces implica nuestro día a día nos lleva a dejar de lado nuestra salud. Nos decimos a nosotros mismos que “no pasa nada”, “mañana empiezo la dieta” o “no tengo tiempo para hacer ejercicio”. Pero la realidad es que nuestro cuerpo nos va acumulando “facturas” que tarde o temprano nos cobrará si no prestamos atención. La buena noticia es que los reconocimientos médico-laborales son una forma sencilla y accesible de detectar problemas a tiempo, antes de que se conviertan en algo más grave.
Así que la próxima vez que te ofrezcan uno de estos reconocimientos, ¡no lo dejes pasar! Puede ser la diferencia entre mantener tu salud cardiovascular bajo control o enfrentarte a un problema mayor en el futuro. Prevenir siempre es mejor que curar, y en este caso, el coste es nulo: tu empresa está obligada a cubrirlo. Aprovecha esta oportunidad para cuidar de ti mismo, tanto como cuidas de tus responsabilidades laborales.